Mostrando entradas con la etiqueta Amy Adams. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Amy Adams. Mostrar todas las entradas

lunes, 20 de enero de 2014

No soporto a Amy Adams



Seguramente en este momento usted tiene ganas de gritarme, con manoteo incluido, que ¿¿¿cóoomooo??? Si ella es preciosa y adicionalmente poner cara de enamorado al agregar que la ama. (Si, esa es la reacción de todas mis amigas).


Incluso puede ser que tenga ganas de agarrarme mi cabellera y zarandearme la cabeza hasta hacerme entrar en razón...





Y yo me sostengo. "¿Qué le ven a Amy Adams?"





La primera vez que la vi fue en encantada. Y hasta ahí, todo bien. Digamos que el papel de princesita, mosca muerta, desubicada sin mayor gracia le viene bien. Luego la vi en Julie&Julia, y volví a ver una simple Julie tratando de cocinar una serie de platos para su blog... Muchas mueren con esta historia y a mi me sigue pareciendo sonsa. Esta nena no es capaz de representar una buena crisis existencial. Pero hasta ahí, Amy Adams, era en mi vida como una más de esas que hace películas insulsas.


 







De repente un día de desparche me encontré con una película que no sé el nombre y no he podido encontrar, sobre una loca que va a ir a pedirle matrimonio a su novio en año bisiesto. Casi muero. Qué desastre de papel. La neurosis de la loca psicorrígida de la protagonista representada por Amy me rayó, y no por lo buena, sino por lo pesada. Y concluí que en todos los papeles en los que la había visto, la Adams era una 'pesada', y desde ahí no la soporto.


Este año decidí darle una oportunidad al ver que se ganó un premio y está nominada a cientos más. Entonces me armé de valor y paciencia para soportar a Amy Adams en otro protagónico. Y no pude.


Salí del cine preguntándome ¿qué le ven? Hace las mismas caras en todos los papeles, su naricita parece la de un ratón buscando queso, tiene unas patas de gallina muy notorias al rededor de los ojos  y una arrugota de esas que se hacen al lado de la boca que no me deja concentrar. Y además, este también era el papel de una mujer pesada: la propia moza intensa...






Dicen que le luce el look sexy y de chica mala... ¡A ver! Si la única forma que encontraron los productores, vestuaristas y estilistas de hacerla ver sexy fue alborotarle el pelo y ponerla a mostrar las tetas en toda la película -porque cuerpo no tiene-, y aún así, Jennifer Lawrence se la comió viva en materia de "sexyness".



  
Entonces no sé. Espero encontrar algún día alguien que esté de acuerdo conmigo... Y seguramente necesito dejar de concentrarme en su cara, y verle otras cosas positivas como actriz. O quitarme la imagen de princesita pesada que se me quedó pegada, para ver si logro disfrutarme sus películas, a pesar de su presencia.


  

*Si en los comentarios va a salir a decirme que no tengo ningún derecho a criticar a Amy Adamas, porque soy más fea que ella, y que seguramente esta es la opinión de una loca resentida... absténgase... Que tengo claro que soy más fea, más pobre y menos talentosa que ella!